El altísimo costo político, en violación a la Constitución, con los
Derechos Humanos, en vidas, represión, fraude, delitos, peculado de uso,
condena internacional, sanciones, que se granearon en tan poco tiempo es
sumamente elevado, para lograr instalar una “constituyente” que ya no podrá
cumplir el objetivo principal para la cual fue implementada
Por Alex
Vallenilla / @alexvallenilla
El pasado 30 de julio, cuando el oficialismo, sin ningún tipo de
reproches propios en cuanto a la impopularidad que tiene, el uso de los
recursos del Estado para movilizar gente, la represión salvaje, el acosamiento,
persecución y amenazas, se esperaba que la población, masivamente estuviera en
las calles manifestando su rotundo rechazo contra la consolidación ilegal de la
Asamblea Constituyente. Hubo de todo, primero descoordinación, unos llamaban a
que se quedaran en sus casas y otros a salir a impedir que los oficialistas
concretaran el adefesio, resultado de las distintas visiones que hay en los
sectores de oposición, en todos, en la MUD y en los anti-MUD.
La "constituyente" no logra los objetivos planteados, por lo que el régimen no podrá recuperar la crisis |
Sólo dos estados tuvieron una presencia masiva en las calles, con una
población enardecida en casi todos sus municipios, Táchira y Mérida, donde se
volcaron a tomar centros electorales con los resultados ya conocidos. En otros cuatro
estados más, hubo incidentes menores. La confrontación focalizada en Los Andes,
hizo que el régimen llevara refuerzos en aviones para los dos estados y
controlara las revueltas, pues el resto estaba en paz. A pesar de la ola de
heridos, muertos e incidentes ocurridos, eso no detuvo al régimen, puesto que
en el sector de empleados públicos, quienes no votaron, al día siguiente les
exigían que debían firmar una declaración, que no pudo votar, a causa de las “trancas”,
y que sus centros electorales fueron saboteados, es decir, muchos no votaron
por rebeldía y sostuvieron como excusa los eventos violentos, igualmente el régimen
los obligó a firmar la declaración de que si votaban por la “constituyente”.
El régimen avanzó y ha montado su Asamblea Constituyente (ANC). Por
ahora, la cúpula roja la vende como “una victoria”.
Primero hay que determinar cuál era el objetivo principal de
implementar la Constituyente. El de sustituir a la Asamblea Nacional (AN), por
una sola razón, la de ser una especie de nueva instancia, avalada con “voto
popular”, para tener legitimidad ante el mundo y poder dar el respaldo de la
emisión de bonos de deuda, renegociar el endeudamiento del país y así lograr un
“respiro” en materia económica, para las cuentas del gobierno. Muy lejos de
quienes alientan la postura de la antipolítica, de que la MUD o la AN “no han
hecho nada”, el factor opositor ha resistido los embates que ha planteado el
madurismo, como presión, y no ha cedido en aprobar avales al Ejecutivo. Los chinos
dejaron de prestarle dinero al madurismo, porque no existe garantía de retorno
sin el aval del Parlamento. Emitir nuevos créditos con vencimientos a 10 años,
sin que la AN los apruebe, es un alto riesgo para el prestamista, nada en el
mundo podría obligar a un gobierno ese tiempo pagar esa deuda, ni siquiera si
fuese de esa misma corriente. La AN ha hecho estoicamente lo que ha podido
hacer, lo demás es parte de manipulaciones, como lo de la partida de
nacimiento, el nombramiento de un nuevo TSJ o destitución del actual, lo de la
Ley de Amnistia, entre otras menudencias que quieren imponer sectores “radicales”,
que buscan una salida inmediata, sin considerar el tamaño del “monstruo” que se
enfrenta.
Se robaron el referendo revocatorio el año pasado, violaron la
Constitución al hacer una constituyente sin un referendo consultivo, asesinaron
a más de 100 manifestante durante la ola de protestas que sacude a Venezuela
desde abril de este año, involucraron a los militares en la peor situación de
represión jamás vivida en este país con miles de heridos y lisiados como
resultado, con atrocidades criminales de llegar hasta las residencias de
civiles, las cuales destrozaron propiedades sin ninguna contemplación en plena
violación de todos los Derechos Humanos y civiles posibles, usaron recursos del
Estado para una campaña electoral, hicieron esas elecciones con un fraude,
denunciado por la propia empresa Smartmatic, que tiene contratos con el CNE,
para el uso de máquinas para el voto automatizado. Han recibido la condena
mundial, que no les reconoce la ansiada legitimidad que buscaban para la ANC,
han recibido sanciones económicas en lo personal, al ser incluidos en la lista
OFAC, lo que no les permite llevar adelante operaciones con bancos
internacionales, ni siquiera siendo “funcionarios” del gobierno, para la cosa
públcia. Instalaron la ANC “a trocha y mocha” y se les dispara el dólar a
precios “estratosféricos” que ahora mantiene a la población en zozobra. Si todo
lo anterior es “una victoria”, que sigan “ganando” así como van.
El costo político, no tanto en lo interno en que 90% de la población
los repudia hace tiempo, donde se los encuentran los cacerolean, la gente se
les va encima, sino en lo internacional, es sumamente grande, a cambio de tener
una Constituyente, que finalmente no podrá cumplir con el propósito principal y
que sólo servirá para perseguir y apresar a algunos dirigentes opositores más y
aumentar así la presión al mundo, para ver quiénes pueden salvar lo asaltado. Es
ese el cuadro que tienen estos señores, que así como Nicolás se burlaba, como
último recurso del que sabe que está perdiendo, de la oposición, por decidir
inscribir candidatos a la elección de gobernadores, le cabe su propia frase: “Tanto
nadar para no tener una constituyente que le sirva para el fin que estaba
determinada”. Es que ni siquiera con los rusos se van a salvar, quienes han
embargado dos barcos de Pdvsa, con cargamento de petróleo, hasta que no paguen
deudas a Rosneft, petrolera con la que tienen negocios en Venezuela.
El régimen ha lanzado su “resto”, quemaron muchos cartuchos para
llegar a esa trágica situación que tienen y que a diario los hunde más. Pero hay
que sumar otros factores, que forman parte de la depresión económica interna. No
hay comida y no hay manera de producirla y ahora que están sancionados por el
Departamento del Tesoro, no les va a ser fácil seguir importando alimentos
porque empresas extranjeras, no asumirán tal riesgo. La cantidad de dinero
efectivo físico, es de 7% al compararse con el tamaño de todo el dinero que
circula en el sistema monetario venezolano, la crisis ha llegado a los bancos,
en su primera fase y es que nadie en Venezuela puede retirar de sus cuentas
bancarias más de 20 mil bolívares en efectivo, entonces, se suma, no hay comida
y no hay dinero. Pero falta más, la situación va a empeorar, la importación de componentes
para fabricar gasolina es ya insostenible y las empresas norteamericanas que
surten, no querrán hacer negocios con personas como Simón Zerpa, vicepresidente
de Finanzas de Pdvsa, incluido en la lista OFAC, por lo que es altamente
probable que una crisis de combustible se suma a la que ya existe, con los
alimentos y la que se desarrolla con la del dinero efectivo. Los bancos suizos
comienzan a vetar el comercio con bonos de deuda venezolanos. Con razón Padrino
López, escribe “tuits”, pidiendo a Dios que le dé sabiduría, él mismo ha
permitido que todo esto llegue a tal extremo, siendo el supuesto jefe, del
último bastión que sostiene a la cúpula que tanto daño le ha hecho a Venezuela,
la Fuerza Armada. ¡De paso! A alguien en Anzoátegui se le ocurrió decomisar la
poca comida que hay en venta en las calles y en Trujillo, prohibir el “avance
de efectivo”, son unos locos, jugando con una “bomba atómica” que está activada. 11/08/2017
Muchas gracias por tu participación de hoy en www.radioclaretamerica.com
ResponderEliminarSiempre a la orden Laura
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