Así es la autodestrucción del PSUV y el chavismo

Por Alex Vallenilla / @alexvallenilla

Antes, una recomendación para el lector. Hágase un favor. No oiga, no lea noticia alguna, declaración o discurso, que emitan los atorrantes, Diosdado Cabello y Jorge Rodríguez.

Luego de octubre, una vez se pague deuda externa, si se paga, no habrá recursos para importar alimentos en Venezuela, ni siquiera para seguir sosteniendo a Cuba

En este país cunde la desesperanza. Cuando se pregunta sobre ello, muchos dicen, “es que Diosdado dijo que...” o “Jorge Rodríguez dijo que...”.

Tenga por sentado, que esa es la función de ambos. Mediáticamente, estos dos voceros, de un sector radicalizado en el PSUV, dedican sus esfuerzos en desmoralizar a la población. En el caso de Cabello, quien viene del mundo militar y tiene formación en táctica intimidatoria, sabe perfectamente como amenazar, amedrentar y tratar de presentar una realidad distinta. Haga memoria. Recuerde cuando decía todo aquello del resultado de las elecciones parlamentarias, cuando junto con Maduro, amenazaban que si la oposición ganaba, entonces habría una revuelta nacional de chavistas en la calle acabando con la AN. ¿Ocurrió eso? No.

El otro personaje, un siquiatra, experto en asuntos de la psiquis, es muy hábil hilvanando discursos y declaraciones con un contenido manipulador, Jorge Rodríguez sabe dar uso a los recursos de la  neurolingüística, por ello sus preparadísimas declaraciones tienen el propósito de atacar directamente la moral, de confundir, de desesperanzar, de hacer que incluso usted repita lo que él se propone, como eso de reiterar hasta el cansancio que no habrá referendo revocatorio. No les preste atención. Hágalo por su bien y no contribuya con las campañas mediáticas de este par.

Desespero radical

El sector radical que tiene control sobre el sistema de cambios de divisas en el país, Cencoex, ha librado una dura batalla interna, en la que por ahora lograron parar el avance de los reformistas. Logran sacar al ahora ex ministro Miguel Pérez Abad, quien en su plan, con el dólar Dicom, ya con las pruebas para su puesta en funcionamiento para la unificación cambiaria, terminaría de acabar con el dólar de Bs 10 y al liberar el precio de la divisa, el retroceso en el mercado paralelo, sería más marcado, luego que desde marzo de este año, ha descendido desde Bs 1.250. Las mafias enquistadas en Cencoex vieron el fin del mega negocio de controlar las divisas, la principal causa de la actual crisis económica, ellos prefieren que el dólar paralelo siga subiendo, puesto que es el gran negocio de este grupo, es así como se financian en parte. A ello se suma el negocio de la importación de alimentos por grupos de pseudo-empresarios favorecidos por este sector del PSUV.

A lo anterior hay que sumar el discurso de terror que ahora generan, con el control de medios que tienen a su favor, Últimas Noticias, El Universal, (Perdieron el control de Globovision, por orden del “tuerto” Andrade, por eso amenazan otra vez al canal, puesto que el “tuerto” diligencia sus asuntos, directamente con el Imperio). El sector radical, que intenta sobrevivir a su inevitable colapso y fin definitivo, en un arrebato, logra controlar el ministerio de Interior y sus principales voceros, ahora blanden de nuevo el discurso aterrador: expropiar, intervenir, decomisar. Es tan así, que la crisis económica también los ha afectado, de allí que uno de sus bastiones, el Seniat, acaba de implementar operativos por todo el país para aplicar cientos de miles de multas, debido a que perdieron también el control de los puertos y aduanas y eso les ha mermado sus recursos, puesto que la inflación que sus mismas acciones ha creado, también les castiga por igual.

Otro factor que les afecta es que a Venezuela comienza a entrar comida por las fronteras. La banda mafiosa que controla las importaciones de alimentos, el dólar, los impuestos de importación, ve aterrorizada, cómo si el país se reabastece normalmente, se les termina el gigantesco negocio de “bachaqueo” y saqueo del erario público de las pocas divisas que quedan. En esta parte, la guerra interna la tienen perdida, porque si en este país no hay comida, el culpable será el general Vladimir Padrino López, a quien le han dejado la tarea. Es notorio que desde ese sector sabotean la labor encomendada. Se vio con la intervención del Mercado Mayorista de Carabobo, burdo montaje para demostrar “poder”, como lo hizo anteriormente Maduro con el “dakazo”, lo que hizo fue profundizar la crisis. Es lo que busca el sector radical, hundir más al país, a la población someterla a la peor hambruna, sólo así, buscan la impunidad que no han logrado, que se les perdone todas las acusaciones que tienen y se les descongelen los caudales de capitales y activos que tienen en Estados Unidos. Aquí entonces viene el pulso, a ver quién tiene más fuerza.

El sector radical sabe que si se realiza el referendo revocatorio, su fin es definitivo. Si se libera el dólar, se les termina el financiamiento. Si el país se abastece, las mafias del Min Alimentación se secan. Sin embargo todo esto afecta al ciudadano común que no tiene comida, medicinas y lo poco que hay es sumamente costoso.

La tragedia final

En medio del desastre, otro preocupado es Raúl Castro, quien ya debería saber a estas alturas, que Venezuela no podrá sostener más esa isla, más allá de noviembre o diciembre de este año. La razón es que los compromisos que tiene la administración Maduro, son tan grandes, que si se decide por uno, deja en el aire otra tanda de obligaciones, puesto que ya dinero no queda. Se expone el régimen al impago de deuda, y busca desesperadamente, saltando todas las leyes, ver como renegociar con los banqueros de Wall Street, los llamados “fondos buitres”, a quienes Venezuela les debe, por obra y gracia del mismísimo Hugo Chávez, quien prefirió no usar los mecanismos de los organismos multilaterales y decidió endeudarse con los “Amos del Universo”, los banqueros norteamericanos e ingleses.

Debe dejarse claro, bien claro ante el mundo y es labor de la MUD y sus dirigentes, es obligación de la Asamblea Nacional, dejar bien sentado que si Maduro logra un dólar renegociado o prestado y la AN no autoriza la operación, ese dinero NO SE LE ESTÁ PRESTANDO A LA REPÚBLICA, SINO A NICOLÁS MADURO. Por lo que banquero que se arriesgue a tal, no podrá en el futuro próximo exigir de vuelta sus capitales a este país. La supuesta inversión en el Arco Minero, sin aprobación de la AN, es ilegal, si es cierto que tienen recursos para tal, los inversores, perderán. En todo caso, si ese proyecto contara con los recursos mencionados desde hoy, sólo se podría ver la primera fase culminada en mínimo 10 meses, si es que la mafia devoradora de todo, no le mete mano a ese asunto, por lo que para eso no hay tiempo.

El sector radical, no tiene un plan para reabastecer al país, ni para que la inflación baje ni para desmontar los controles, conjunto de políticas erradas que sólo ha beneficiado a una cúpula mil millonaria, hoy perseguida en el mundo por las autoridades financieras de EEUU. Eso mismo los ha llevado a un hueco, del que pretenden salir, cavando hacia abajo, con más de lo mismo. En todo caso, Pérez Abad con las críticas y demás, era lo menos malo entre toda esta calamidad.

Si los radicales logran bloquear el referendo, asunto en el que el pasado lunes no tuvieron la fuerza para evitar la oficialización de las firmas del 1%, en apenas dos o tres meses, el caos, escasez y crisis extrapolada será fatal, para toda la población. Entonces se vuelve al principio, la hambruna y caos volcará a la gente de nuevo a las calles, como en junio y julio pasados, meses en que miles de manifestaciones, motines, alzamientos, saqueos, bloqueos de vías con saqueos de cargas, colmaron al país y aterrorizaba a quienes dirigen la FAN, ya que la única posibilidad que tenían era la de disparar al pueblo, como de hecho lo hicieron, con el saldo de seis muertos y lo que obligó la salida del ex comandante de la GNB, hoy ministro.

Nuevamente, le tocará a los militares decidir y esta vez, definitivamente, o matan y masacran a medio país, que se terminará de alzar si el radicalismo no permite el referendo, lo que permitirá que las mafias sigan enquistadas y no haya alimentos, medicinas ni nada, o ellos mismos deciden poner coto a esa banda y entregarlos a la justicia internacional. Son solo dos opciones, tiempo no queda, en apenas un mes hay que pagar deuda externa y no quedará recursos para nada, para nada.