ENFOQUE ECONÓMICO
EL ESTADO TIENE RÍGIDO CONTROL DE LA PRODUCCIÓN
Por Alex
Vallenilla / @alexvallenilla
Con la caída de la producción interna de
bienes y servicios en Venezuela, el acaparamiento que esgrime el partido de
gobierno, es sólo una excusa política y demagógica que busca tapar lo que realmente
el país vive: escasez. Esto se resume en que ninguna mercadería producida en
Venezuela, está fuera del control y fiscalización estatal.
En el caso de los alimentos, sector sensible.
Luego de entrevistar a varios gerentes de distribuidoras de rubros alimenticios
se consigue lo siguiente.
El organismo Silo Almacenes y Depósitos
Agrícolas (SADA), tiene un férreo control sobre los inventarios que lleva la
industria agroalimentaria. Una empresa de distribución de alimentos debe
declarar las cantidades en almacén y a ser transportadas, sino es sancionada.
Las productoras y distribuidoras deben
informar qué y cuánto producen, y por ello son fiscalizadas, deben indicar si
en un almacén A hay n toneladas en
existencias y si por casualidad, la empresa por razones de espacio o logística,
lleva una parte de ese inventario para un galpón B y no lo informa, es
sancionada.
Las productoras y distribuidoras deben vender
obligatoriamente 60% de su producción a o sus inventarios a precios regulados a
los abastos del Estado, llámense Mercal, Bicentenarios o Pdval y deben
demostrarlo, sino son sancionadas.
Del 40% que queda en sus galpones, el 70% debe
ir obligatoriamente a Caracas, porque para el SADA en la ciudad capital no debe
haber desabastecimiento, ya que es estratégico para el partido de gobierno, así
dejan al interior del país a la deriva con la escasez, sino lo demuestran son
sancionadas.
Armando Campos señala en un reporte que el
Estado tiene 94 empresas en el sector alimentos, en el caso del café controla
el 75% del mercado, tiene 10 centrales azucareros, ocho plantas procesadores de
leche, 11 plantas procesadoras de carne, seis procesadoras de harina de maíz,
tres fábricas de salsa de tomate, más de 11 molinos de arroz, controla 62,6%
del mercado de rubros regulados.
Así es claro determinar que el acaparamiento
es casi imposible y quienes lo hacen son bien temerarios luego del rígido
control que tiene el Estado, además las empresas estatales ¿Qué hacen?
¿Producen? Porque evidentemente no es acaparamiento lo que hay, es escasez. Es urgente
y se ha dicho reiterativamente que la producción interna debe rescatarse y promoverse
la inversión y el retorno de capitales, de lo contrario los anaqueles nunca
estarán surtidos, con las consabidas consecuencias políticas y sociales.
25/02/2103