Por Alex Vallenilla / @alexvallenilla
Nicolás Maduro ha propuesto usar el bitcoin y el ethereum como forma
de pagos internacionales, en vista de las sanciones que EEUU aplica. Hay
analistas económicos en el mundo que han adelantado la posibilidad de que los
bancos centrales tendrán que adoptar las criptomonedas como parte de sus
reservas internacionales en un futuro próximo, tras el fracaso del dinero
fiduciario.
Maduro ha tocado un punto muy delicado. Según la información, el Banco
Central de Venezuela (BCV), estaría realizando pruebas para esto, bajo la
petición de Pdvsa.
Lo novedoso es que Venezuela sería el primer país en el mundo que
oficialmente utilizaría de manera oficial, los “tokens” como forma de pago,
tras el fracaso de su moneda fiat, producto de la crisis que creó el chavismo.
Fracaso del petro
Pdvsa estaría vendiendo petróleo a cambio de bitcoines. Lo que
supuestamente harían con el “petro”, una criptomoneda creada de la mano de los
rusos, que terminó fracasada por su excesiva centralización, además de las
sanciones que aplicó EEUU.
Aunque el precio del petróleo se seguiría referenciando en dólares,
implicar el uso del bitcoin, es un paso a la desdolarización. Se debe tener
presente, que el hecho de que el petróleo en el mundo se comercie en dólares,
permite a los norteamericanos emitir deuda. La propuesta de Maduro es sin duda
dirigida desde la alianza chino-rusa, que fomenta la desdolarización en el
mundo.
Los chinos, rusos e hindúes, están comprando gigantescas reservas de
oro. Esos países se preparan para lo que estiman sería la debacle del dólar en
poco tiempo. La desdolarización es parte de la confrontación que China y Rusia
ejercen de manera conjunta contra EEUU, sobre todo luego de las sanciones
contra los rusos.
Trump y el bitcoin
El presidente de EEUU podría reaccionar, con medidas para reprimir el
uso del bitcoin, lo que afectaría entonces a miles de empresas en el mundo, que
no tienen que ver con la crisis venezolana. Trump podría implementar sanciones
contra el uso del bitcoin, que si bien sólo sacaría a compañías del juego,
estas medidas no acabarían con la criptomoneda, salvo agregar volatilidad.
Los venezolanos ya han derrotado al régimen chavista/madurista, cuando
desde hace unos seis años comenzaron a usar el bitcoin para evadir el control
de cambios. Maduro ahora intentará, evadir las sanciones.
El régimen de Maduro estuvo reprimiendo el uso del bitcoin en 2014,
2015 y 2016, hasta que tuvo que cambiar su postura e implementó regulaciones
para el uso de la criptomoneda en Venezuela.
Contra el dólar
Sería difícil para EEUU aplicar sanciones para bitcoin, porque eso
haría reaccionar al mundo entero, sobre todo a los países que tienen libertad
en cuanto al uso de las criptomonedas. Otros bancos centrales podrían unirse a
la propuesta del régimen venezolano, y se fomentaría un sistema de pagos
paralelo, que abandonaría al dólar de manera directa.
Independientemente de qué ocurriría con el bitcoin, tras la medida que
anunció Maduro, lo que se debe tener claro es que al querer recibir bitcoines
por petróleo, Venezuela estaría sentando un precedente histórico contra el
dólar. Sin duda alguna el “stablishment” norteamericano va a reaccionar, porque
si otros siguen el ejemplo, China y Rusia habrían logrado otros avances en su
cometido.
No tiene garantías
El uso del bitcoin no le garantiza al régimen madurista evadir
totalmente las sanciones. De la misma manera en que los funcionarios del régimen
que están sancionados, no pueden hacer operaciones internacionales, con el
bitcoin tampoco podrían conseguir dólares de manera directa.
La mayoría de los intercambios en el mundo aplican las normas KYC, que
permiten identificar a los clientes. Cualquier intercambio en el mundo que esté
al tanto de las sanciones de EEUU, no procesaría pagos para los afectados.
El régimen tendría que moverse sólo en el esquema de la naturaleza
propia del bitcoin, hacer y recibir pagos siempre con criptomonedas. Cambiar a
otras cripto alternativas. Los pagos tendría que hacerlos con los “tokens” y es
en esta parte en la que encontrará grandes dificultades, dado que las
principales corporaciones en el mundo, sobre todo del sector petrolero, aun no
usan la tecnología “blockchain”.
El BCV, que esta fuera de sanciones hasta marzo de 2020, podría
recibir los tokens y a cambio entregar bolívares o divisas que no sean el dólar
y que tenga en sus reservas.
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