El BCV aplica la medida de encaje legal que restringe el crédito y el ingreso de los bancos, y al mismo tiempo sigue emitiendo dinero para sostener al Estado
Por Alex Vallenilla / @alexvallenilla
Buena parte de la población venezolana se ha sorprendido con larepentina caída de precios de algunos rubros básicos en varias regiones y es
que el recorte de precios de hasta 30% ha tomado por sorpresa a la
colectividad, confundida con la peor crisis económica que sufre Venezuela.
Los bancos venezolanos se mantienen con "respiración artificial" |
El régimen de Nicolás Maduro, ha emprendido acciones radicales para
buscar ese efecto, pero las medidas que está empleando son sumamente peligrosas
y puede dejar en “cenizas” al sistema financiero venezolano.
Una de las medidas que ha tenido más incidencia en los últimos días,
es la del encaje legal de 60%. Eso significa que la banca debe colocar más de
la mitad de la liquidez de sus reservas excedentarias en depósitos en el Banco
Central de Venezuela (BCV), a cambio, el ente monetario no pagará intereses.
Pero el BCV le juega sucio a la banca. Porque de esa forma obliga al
sector financiero a que restrinja el crédito a los usuarios o a sus clientes,
que es el negocio natural de los bancos, prestar dinero, por eso, últimamente
no aumentan los límites de las tarjetas de crédito. Los bancos no pueden
hacerlo mientras exista la medida.
Aunque algunos bancos estatales si lo han estado haciendo, como el
Banco Bicentenario.
Caída de la demanda
En vista de que en Venezuela los salarios quedaron muy por debajo del
alza de precios, los usuarios comenzaron a financiar sus consumos con sus
tarjetas de crédito y en la medida en que el BCV aumenta la liquidez monetaria,
la circulación de dinero aumentaba las reservas excedentarias, convirtiéndose
la emisión de dinero desde el ente monetario, junto a la capacidad de los
bancos de crear liquidez por la vía crediticia, prácticamente en el principal
ingreso de los bancos.
En este entorno, los bancos venezolanos tienen “vida artificial”.
El alza abrupta de la liquidez, junto a la escasez de bienes y
servicios en Venezuela, crearon la hiperinflación.
Al obligar a los usuarios no poder seguir endeudándose para cubrir su
consumo, porque ya el banco no puede aumentar los límites de crédito, cae la
demanda de bienes y servicios. También esto impacta en la compra de divisas, es
una de las explicaciones de la caída de precios que se registra ahora.
A la banca le quedó aumentar el costo de los servicios bancarios, que
se han vuelto precarios, por ejemplo, hay bancos que están otorgando chequeras
de 25 piezas, cada año. Hay restricción para abrir cuentas, porque los costos
de emitir plástico para las tarjetas de débito, son altos ahora.
La madre de las distorsiones
Parte del juego sucio que el BCV y Sudeban le aplican a la banca, es
que paradójicamente, se aplica el encaje legal para evitar que los bancos emitan
más crédito y con ello frenar la capacidad de crear dinero desde la banca, pero
el ente monetario sigue emitiendo dinero para cubrir el déficit estatal y las
pérdidas de Pdvsa.
Por ejemplo, en enero de este año, el aumento de liquidez en un mes
fue de 97,72%. En un año el salto ha sido asombroso, de 107.897,43%.
Como consuelo, a los banqueros les permitieron subir la tasa de
interés activa a 40% anual. Que es prácticamente nada al compararse con una
hiperinflación que según datos de la Asamblea Nacional (AN), ya ha superado
1.000.000%. Esto permite decir que los bancos venezolanos son unos cadáveres
que caminan.
Maduro ha iniciado un proceso de liquidación total de la banca
venezolana. Han creado un mecanismo para tratar de frenar la subida de precios,
que saldrá más costoso cuando el sistema ya no pueda soportar más.
Podrían soportar algunas entidades que tienen respaldo desde el
extranjero.
Lo más fácil era permitir al sector privado aumentar la producción
interna de bienes y servicios, que es lo que está escaso.
Ineficaz
Para la consultora Ecoanalítica, la medida ha lucido ineficaz. En su
sitio web, los expertos de esta empresa, señalan que “parece generar
distorsiones adicionales sobre un sistema bancario y una actividad crediticia fuertemente
limitada por la hiperinflación”.
Ecoanalítica reportó que las tasas overnight subieron en promedio 9,54
puntos, luego del anuncio de la implementación del encaje legal, los bancos
buscaron adelantarse a la falta de disponibilidad que se esperaba.
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