Cierran mercales y
pdvales y los sustituyen por bolsas de comida que venden sólo a los del PSUV,
comienza a mermar la producción de gasolina
Por Alex
Vallenilla / @alexvallenilla
La crisis empeora y el gobierno que se viene paralizando en casi todo
el país, ya ha perdido incluso la capacidad de seguir alimentando las regiones.
El cierre de los Abastos Bicentenario, con el despido de más de 2.000
trabajadores es una señal clara de la debacle venezolana en materia alimentaria,
era el último recurso que tenían grandes mayorías de lograr alimentos a precios
regulados, incluso los desempleados que se dedican a hacer colas para comprar
productos y revenderlos en las conocidas redes de “bachaqueros”, quedan prácticamente
“en el aire”, lo que complicará más la gravedad de la escasez y el alza de
precios por los pocos rubros disponibles a “precios justos”.
En distintas poblaciones, los mercales y pdvales ya han sido cerrados
y fueron sustituidos por operativos por ahora regulares de venta de bolsas de
comida “en combos”, contentivas de algunos productos como harina, arroz, leche
en polvo, mantequilla, azúcar, a un precio fijo, en algunos casos de hasta
1.800 bolívares.
Esta modalidad no logra surtir a todos por igual, ya que estos
operativos se conducen a través de las llamadas UBCH, las cuales están
discriminando a la población y condicionando la venta a quienes no militan en
el PSUV. Se prevé que esta situación se hará más difícil, debido a que Nicolás
Maduro ha instruido un nuevo proceso de inscripciones en el PSUV y la entrega
de carnets que acrediten a un ciudadano como militante de ese partido, lo que
le permitiría condiciones especiales para la compra de productos regulados, los
cuales son cada vez menos.
La falta de comida se suma a la falta de medicinas, agua,
racionamiento de electricidad y a lo que se prevé en poco tiempo comience a
merma la producción de gasolina, debido a que las refinerías venezolanas
dependen de la electricidad del Sistema Eléctrico Nacional, ya que perdieron
capacidad de auto-generación. Con los racionamientos de luz y la paralización
del gobierno los viernes, la atención en oficinas públicas será mucho peor, lo
que indica del inicio del colapso total del Estado.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Muchísimas gracias por dejar sus comentarios