Si bien la actividad del buhonero es perniciosa para la salud de la
economía, porque no paga impuestos municipales ni patentes, no paga energía
eléctrica, agua, aseo urbano, Seguro Social Obligatorio, no aporta al fondo de
viviendas, al INCE, no declara IVA, ni Impuesto Sobre La Renta, sino que
congestiona las calles y las ensucia, no es cierto que sea por culpa de estos
que haya escasez e inflación.
Los tartufos que tienen bajo su responsabilidad el orden del
funcionamiento de la nación, han pasado desde el Imperio, la CIA, los rayos,
las iguanas y Uribe, hasta los buhoneros, como los responsables de todas las
calamidades que hoy se viven en la Venezuela chavista, sin que el ciudadano
sepa, qué hacen los que tienen los puestos de gobierno.
Una de las causas que no haya productos suficientes para todos, es
porque en un plan de estatizaciones, el gobierno pasó a tomar control de
empresas que deben estar produciendo, de tierras que daban alimento que
alcanzaba hasta para exportar. Todas las expropiaciones hoy arrojan sendos
fracasos; cementeras, empresas del hierro, del agro, manufactureras y
financieras, que sólo muestran números rojos, con la consecuencia de la falta
de productos en el mercado. No eran los buhoneros los que andaban de cadena en
cadena con aquella frase “¡Exprópiese!”.
La impresión de dinero inorgánico, usado para repartir en planes
clientelares con fines electorales, ha generado que se aumente la demanda de
bienes y servicios, entonces lo primero, menos productos por caída de
producción y más gente comprando por exceso de dinero disponible en el sistema,
presionan la inflación. No son los buhoneros los que tienen el control del
Banco Central de Venezuela (BCV) ente que define la política monetaria.
Ambas razones han derivado en una situación de escasez y alza de
precios, por lo que el gobierno aplicó medidas para evitar el alza del costo de
la vida, la regulación de precios, obligando a las empresas que quedaban en pie,
cerrar sus puertas por inviabilidad del negocio al perder rentabilidad. Los
buhoneros no dirigen la Sundee.
Lo último se ha traducido en desempleo, y los que ganan sueldos bajos,
ven como ya no pueden subsistir, entonces, alguien que está sin trabajo o el
que lo tiene y sabe que no puede ahorrar o invertir en bolívares porque es una
opción que le generaría pérdidas, entra en el negocio exótico de revender los
productos regulados. No es culpa del buhonero que de alguna manera, en medio de
toda esta situación generada desde lo más alto del gobierno, éste busque la
manera de no dejar morir de hambre a sus hijos.
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