Chavismo intenta desmantelar la Asamblea Nacional

El sector radical del régimen, ha desatado una ola de persecución que tiene por objeto abortar las negociaciones entre EEUU y Rusia

Por Alex Vallenilla / @alexvallenilla

Nuevamente el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), controlado por el chavismo/madurismo y la ilegal Asamblea Nacional Constituyente (ANC), arremeten contra diputados de la oposición miembros del Parlamento, único ente reconocido en el mundo como legítimo.

El sector radical del chavismo arrecia una serie de ataques contra los diputados, para producir una estampida, huida masiva de estos. Luego de los eventos del pasado 30 de abril en La Carlota, cuando terminó liberado Leopoldo López, el chavismo encarceló luego, al primer vicepresidente de la AN, diputado Edgar Zambrano y a sus asistentes.

Otro grupo de diputados se alojaron en embajadas, otro se fue del país.

Esta vez se arremete contra los diputados Carlos Paparoni, Miguel Pizarro, Franco Casella y Winston Flores. El chavismo radical torpedea con todo al Parlamento venezolano con el propósito de debilitar el instrumento del presidente de Estados Unidos, Donald Trump de ejercer presión internamente y para lograr acuerdos con Rusia.

La persecución contra los dirigentes opositores se origina desde el Sebin, cuerpo policial que ahora tiene bajo su control el sector radical.

En la mañana del martes, una comisión del Sebin, cuerpo policial de inteligencia controlado por el chavismo radical, cerró el paso a entrar al Palacio Federal Legislativo, por la existencia de un supuesto artefacto explosivo.

NEGOCIACIONES

Al mismo tiempo que esto ocurría, en Sochi, Rusia, se reunieron los diplomáticos Mike Pompeo y Sergei Lavrov. Pompeo dijo que no hubo acuerdos, recalcó que Maduro debe irse del poder, mientras su par, Lavrov, manifestó que los venezolanos deben resolver sus problemas y el mecanismo sería el diálogo. Entre los rusos y norteamericanos existe consenso en que Maduro salga del poder, la falta de acuerdos está en la forma en que debe salir. El sector del chavismo radical, señalado de varios crímenes no acepta ningún tipo de negociación en la no sea este grupo el protagonista.