Las empresas canadienses que producen cannabis psicoactivo y no psicoactivo, buscan el clima tropical y agua natural para bajar costos
La compañía canadiense Canopy Growth, adquirió el año pasado Spectrum
Cannabis Colombia por 61 millones de dólares. La empresa colombiana está autorizada para cultivar 42 hectáreas de cannabis
o marihuana medicinal. Posee en el departamento del Huila, una propiedad
con 126 hectáreas.
Las compañías canadienses que producen cannabis psicoactivo y no psicoactivo,
se interesan en el clima favorable, el suministro de agua natural, la actividad
agrícola, para aumentar su producción de marihuana medicinal.
Colombia podría convertirse en
la “Arabia Saudita del cannabis”, como lo contempla el analista Matt Smith,
para TheMootleyFool.
En 2017, la administración del expresidente Juan Manuel Santos, forjó un marco legal y normativo que creó un
entorno estable, transparente y accesible para el cultivo legal de la marihuana.
Esto está siendo visto muy favorablemente por muchos participantes de la
industria fuera de la nación andina.
La producción de marihuana en
Canadá está limitada por los costos, ya que se debe producir en invernaderos,
mientras el clima tropical colombiano permitiría aumentar la producción,
permitir a Colombia seguir con su programa de substitución de cultivos de cocaína
y generar ingresos alternativos a los alicaídos por el precio del petróleo.
Otra compañía ya con ventajas en este nuevo sector es PharmaCielo. Una de las primeras en tener licencia para
sembrar marihuana legalmente en Colombia, esta es una propiedad de 27
hectáreas con 12 hectáreas de invernaderos al aire libre, que pueden producir
12 millones de esquejes semanales para abastecer las 600 hectáreas previstas
para el cultivo por contrato, ubicada al norte de Medellín.
Recientemente recibió su Certificación de Garantía de Calidad ISO 9001
por sus operaciones de cultivo y procesamiento de marihuana medicinal.
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