Trump presiona a Turquía para que no acepte los misiles S-400 de Rusia,
si los turcos aceptan los misiles Patriot, Putin habría quedado solo en Siria,
sufriendo una aplastante derrota
Poe Alex Vallenilla /
@alexvallenilla
En Efectivo.- La crisis
venezolana, que depende de poderes reales como el de Estados Unidos y Rusia,
tendrá que esperar un poco más. Washington
tiene su foco en el Medio Oriente, mientras lo que ocurre en Venezuela se
atenúa, la situación con Irán y Turquía se hace más tensa.
La Casa Blanca espera que
Turquía, no asuma el acuerdo de adquirir los misiles rusos S-400, al
contrario presionan para que Ankara acepte la oferta de los misiles Patriot,
con grandes descuentos, de lo contrario enfrentará sanciones estadounidenses.
Si Turquía admite el uso de los misiles S-400, estaría infiltrando a
Rusia en la OTAN. Si Turquía no acepta la propuesta rusa, Vladimir Putin
sufriría un gran revés y su proyecto en Siria se podría venir abajo.
Al mismo tiempo, Irán podría
recibir sanciones estadounidenses, por lo que los países aliados de los rusos
en Siria podrían dejarlo solo. La presencia de Rusia en Siria, le comienza
a restar popularidad a Putin en su país.
"Cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres"
Juan Guaidó
La oposición venezolana decidió
el año pasado ponerse en manos de la comunidad internacional, para
enfrentar al régimen de Nicolás Maduro, con una propuesta que ha puesto en
práctica la nueva directiva de la Asamblea Nacional (AN), con la juramentación
de Juan Guaidó como presidente interino y respaldado por 50 países.
Desde entonces, 50 países de Occidente se han alineado a favor de
Guaidó, luego que el presidente de Estados Unidos Donald Trump lo reconociera
como presidente legítimo, mientras Rusia, China, Turquía, Irán y Cuba, apoyan a
Nicolás Maduro.
Rusia tiene sendos intereses en Venezuela, económicos y geopolíticos. En conversaciones con los norteamericanos,
los rusos han exigido que su salida del país sudamericano sería posible,
siempre y cuando Estados Unidos sea recíproco con Crimea y Ucrania.
Es en ese punto en que todo permanece nuevamente trancado. Los
norteamericanos no pretenden ceder en Crimea y Ucrania, por lo que se han aventurado
a derrocar a Maduro promoviendo una división de las fuerzas armadas, aplicando
sanciones y ejerciendo presión sobre Cuba, lo que hasta ahora no le ha dado
resultado.
Aunque existan acuerdos
previos, EEUU intenta sacar a Maduro, sin tener que negociar términos con
Rusia, tal como lo han planteado estos.
La precaria posición de Maduro cada vez es más frágil, no sólo es
asediado por Guaidó y la oposición, sino que enfrenta una crisis interna, al
tener que soportar también el asedio de las facciones del chavismo que no
quieren ceder el poder.
Europa ha impulsado el Grupo de Contacto para buscar una mediación.
Noruega se ha ofrecido como mediador en el conflicto, sin embargo no se ha
logrado algún acuerdo. Guaidó permanece
inflexible con la renuncia o salida de Maduro del poder para avanzar a la
transición, mientras el chavismo/madurismo, que mantiene control militar,
va desmantelando a la AN lentamente y exige elecciones parlamentarias.
| EL INTERCAMBIO |
La crisis de Venezuela se ha mezclado con los conflictos globales en
que EEUU y Rusia se miden. Venezuela está dividida, las fuerzas armadas
obedecen al eje chino-ruso, los partidos políticos, con mayoría de la
población, se han alineado con los países occidentales. Todo está prácticamente
en manos de Trump y las decisiones que tome, aunque en Estados Unidos hay
análisis que apuntan a que así como Trump comenzó a retirarse de Irak, de
Siria, implementa el muro con México, podría terminar cediendo en Crimea, lo
que podría resultar en una salida para Venezuela.
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