Qué efectos tiene la restricción del crédito bancario en Venezuela

Antes, los bancos venezolanos buscaban deudores potenciales para recibir créditos de las gavetas obligatorias, ahora ni siquiera se suben los límites de tarjetas de crédito

Por Alex Vallenilla / @alexvallenilla

Unos años atrás, en pleno crecimiento de la burbuja de bolívares en Venezuela, el gobierno de Hugo Chávez exigía a la banca privada mantener gavetas crediticias. Los bancos debían cumplir metas con el financiamiento a los sectores agrícola, construcción, industrial, manufacturero, turístico, comercial. Los bancos venezolanos buscaban entre sus clientes a deudores potenciales.

Al mismo tiempo, Chávez con su política apalancada con los precios del petróleo, aplicaba un proceso de expropiaciones y de extremos controles de la economía, lo que obligó a muchísimos beneficiarios de los créditos que el mismo extinto presidente exigía, a comprar divisas para protegerse de los efectos, en vez de invertir en robustecer sus sectores.

Cambio radical

Actualmente, el régimen de Nicolás Maduro ha aplicado una medida que los economistas consideran que afecta de manera negtiva a la banca. El Banco Central de Venezuela (BCV) ahora reclama el encaje legal en 100%, lo que quiere decir que los bancos venezolanos deben entregar al ente monetario todas las reservas excedentarias.

Lo anterior resulta en una medida restrictiva o de austeridad, al tomar en cuenta que anteriormente los bolívares fluían fácilmente a través de la capacidad de creación de dinero de los bancos venezolanos, esto tenía impacto en el alza de la liquidez monetaria, aumentando así el circulante y la oferta de dinero, con la consecuencia de impulsar la inflación.

El abuso de la emisión de dinero para cubrir las pérdidas de Pdvsa y el déficit estatal, se combinaba con la capacidad emitir crédito de los bancos, lo que derivó en hiperinflación, luego que las empresas dejaron de producir en Venezuela.

Inversiones de mala calidad

Ahora los bancos venezolanos han restringido el crédito. Ni siquiera hay aumentos de los límites de tarjetas de crédito debido a que el encaje legal no permite posiciones en reservas excedentarias.

La apertura con las divisas, cuyo mercado ahora ha quedado en manos de la banca privada, luego que EEUU aplicara sanciones financieras contra el BCV, aunque se trata de medidas que dificultan el crecimiento económico, obligará a los bancos entregar créditos de manera más selectiva, a manejar sus carteras de forma mucho más responsable, pero para llegar a esto, el entorno económico debe cambiar todavía más.

Se trata de una situación que de alguna manera, permitirá filtrar inversiones de buena calidad, los bancos, con el rol que asumirán en poco tiempo, una vez que el mercado cambiario con protagonismo del sector privado tome vida propia, se cuidarán de financiar inversiones ineficientes, como pasaba anteriormente con las gavetas, que se debían cumplir metas.

Desde el punto de vista político, mientras Nicolás Maduro permanezca en el poder, la inversión privada será muy limitada por desconfianza. Sólo un cambio político permitiría reactivar a todo el sector, que tendría como apalancamiento las inversiones extranjeras, con reglas de juego distintas.

REFORMA

TEn medio de la crisis política, el régimen de Maduro intenta dar un giro, con la apertura del mercado cambiario y la despenalización del uso de divisas en Venezuela, la liberación de precios y de importaciones, aspectos como la seguridad jurídica y una apertura al sector privado para dar paso a la privatización de los servicios públicos, son temas pendientes en lo que se vislumbra, es una reforma que apenas comienza.