Luego de ceder en el
terreno económico con las divisas libres, en el humanitario con la Cruz Roja,
ahora en el tema de los Derechos Humanos con la visita de Bachalet
Por Alex Vallenilla / @alexvallenilla
La ruta de Juan Guaidó se fundamenta en “cese de la usurpación”, “gobierno
de transición” y “elecciones libres”. Hasta ahora no ha sido posible que avance
con el primer paso. Por su parte, el
régimen de Nicolás Maduro ha mostrado su propia ruta, y tiene que ver con algo
similar a los acuerdos de las fracasadas negociaciones en República Dominicana
el año pasado.
Maduro ha dado pasos en su estrategia. Como se ha informado con
anterioridad, el régimen ha comenzado
una reforma económica, luego que se despenalizara en Venezuela el uso de
divisas de manera libre en operaciones de intercambio de todo tipo,
liberación de precios y de las importaciones.
El siguiente paso tiene que ver
con haber permitido la entrada de ayuda humanitaria por la Cruz Roja Internacional.
Viene un evento de gran significación y tiene que ver con la
liberación de los presos políticos.
La estrategia Maduro
El madurismo había dado pasos al respecto, como haber dejado en
libertad al norteamericano Todd Leininger. Luego
se produjo la liberación de Leopoldo López, en medio de una situación confusa,
en la que participó el ex director del Sebin, general Manuel Figuera. También
pudo salir el ex policía Iván Simonóvis.
La presión que ejerce Guaidó y la comunidad internacional es meritoria, porque de alguna manera la división interna del régimen chavista/madurista los ha obligado a tener que ceder en los terrenos señalados
La mayoría de presos políticos son del chavismo radical, un sector del
régimen que los ha utilizado como rehenes hasta ahora. Mientras el madurismo ha
aceptado negociar la liberación de estos, el chavismo radical hace esfuerzo por
seguir encarcelando, como una forma de confrontar las dos visiones.
Misión de la ONU
Se ha confirmado la visita de Michelle Bachelet, Alta Comisionada de
la ONU para los Derechos Humanos para el 21 de junio. Ella y su equipo aspiran visitar las cárceles de los cuerpos de
inteligencia para constatar la situación de los presos políticos en Venezuela y
proceder a un proceso de liberación masiva.
El régimen madurista se prepara para un proceso electoral y ante la comunidad internacional va cediendo terreno en algunos aspectos
La semana pasada, el sector chavista radical tuvo a sus representantes
en Cuba, en una reunión con los principales dirigentes de la isla. Los cubanos se han vuelto protagonistas
en el proceso de negociaciones que hay, con respaldo del Grupo de Lima, por lo
que los radicales del régimen tendrán que aceptar el hecho.
El régimen madurista se prepara para un proceso electoral y ante la comunidad internacional va cediendo
terreno en algunos aspectos. En el económico, en el humanitario y ahora en el
de los Derechos Humanos.
El pulso
Maduro pareciera llevar ventaja ante lo que ha sido la postura
inflexible de Juan Guaidó, quien todavía presiona por el “cese de la usurpación”,
que no es otra cosa que Nicolás Maduro fuera del poder para poder organizar el gobierno
de transición. Estos términos no los acepta el chavismo/madurismo, que todavía
tiene poder de fuego aliado.
Sin embargo, la presión que
ejerce Guaidó y la comunidad internacional es meritoria, porque de alguna
manera la división interna del régimen chavista/madurista los ha obligado a
tener que ceder en los terrenos señalados, lo que es un importante avance.
Aunque no es probable todavía que el “cese de la usurpación” se
produzca en los términos que el Parlamento y Guaidó lo plantean, la liberación de presos políticos viene a
quitar presión en la crisis, lo que abrirá posibilidades a un entendimiento
mayor para lograr la nueva designación del Consejo Nacional Electoral (CNE) y
la organización de elecciones próximas.
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