Sólo un acuerdo de unidad perfecta de AD, PJ, VP y otros derrotaría al régimen chavistamadurista ~ En Efectivo

30 jun 2019

Sólo un acuerdo de unidad perfecta de AD, PJ, VP y otros derrotaría al régimen chavistamadurista

La comunidad internacional presiona por una salida electoral y pacífica en Venezuela lo más rápido posible para salir del atolladero


Por Alex Vallenilla / @alexvallenilla

Los tres partidos políticos con más militantes en Venezuela son Acción Democrática (AD), Primero Justicia (PJ) y Voluntad Popular (VP), los más capaces en convocar movilizaciones, en conformar equipos electorales para trabajar en las mesas y conformar un ejército de testigos, para enfrentar electoralmente al régimen chavista/madurista.


Las divisiones político partidistas han sido una causa esencial, entre un catálogo de opciones, sobre las derrotas electorales de la oposición venezolana. El régimen chavista/madurista fundamenta su estrategia en controlar los centros electorales con su maquinaria electoral, la cual se forja con muchos recursos del Estado, mientras los equipos electorales opositores, son más difíciles de amalgamar.

Pasó en 2012 y 2013
En las elecciones en que el opositor Henrique Capriles enfrentó a Hugo Chávez y a Nicolás Maduro, privó el sectarismo político. Como el candidato era de Primero Justicia, la dirigencia del partido protagonizó y dirigió la mayoría de las decisiones, lo que impactó duramente en la conformación de equipos electorales eficientes.

Los otros sectores siempre elevaron protestas porque el criterio de unidad no existía totalmente en la práctica, siendo que Capriles había sido electo en primarias. Hasta la entrega de franelas de la campaña para militantes, era una causa de controversia entre los cuadros opositores, y no había orden ni liderazgo para evitar los enfrentamientos internos.


Eso influyó mucho en que los equipos finalmente no pudieran ser conformados para la totalidad de centros electorales. Un centro electoral dominado totalmente por el chavismo/madurismo, permitirá que las máquinas y los votos sean manipulados por la maquinaria del PSUV.

Pasó en las regionales de 2017
En las elecciones regionales de 2017, el dirigente de AD, Henry Ramos Allup, lanzó su propuesta de participar para elegir gobernadores, al principio no fue acompañado por PJ y VP, partidos que luego se plegaron y decidieron hacer elecciones primarias. La mayoría de los candidatos a gobernador, fueron de AD, lo que desincentivó a los militantes de los otros partidos a votar y a conformar equipos electorales.


Ramos Allup, igual que Capriles Radonski, sobre estimaron sus capacidades y pensaron que solos podrían derrotar al régimen.

La Unidad
Sólo en 2015, usando una tarjeta unitaria que sicológicamente borraba el sectarismo político entre los principales partidos y con una convocatoria masiva a votar, se pudo ganar la Asamblea Nacional (AN).

El régimen de Maduro, sobre todo los sectores radicales, no descansarán, para evitar que se forje una unidad perfecta entre AD, PJ y VP. También los sectores opositores que ahora se identifican como “derechistas”, que tienen sólo 4% de aceptación popular y que muchos han salido del chavismo “originario”.

Rumbo a las elecciones
El resto de partidos políticos y sectores opositores no tienen incidencia electoral, de allí que al no controlar tampoco bastiones importantes, y no ser parte de quienes toman las decisiones, proponen el llamado abstencionista.


La crisis venezolana conduce a un proceso electoral, al menos ya la OEA hizo el primer llamado, luego que la semana pasada se pronunciara por una solución a la crisis por la vía de elecciones libres, rápidas y transparentes, condiciones que se negocian entre los factores exógenos y los internos, que se han mezclado en la crisis venezolana.

AD, PJ y VP, tienen la capacidad de convertirse en un bastión político que haría valer el 40% de preferencia que tiene la oposición en conjunto, sobre el 17% que tiene el régimen chavista/madurista, siempre y cuando logre no sólo condiciones mínimas, sino articular a un ejército de miembros de mesa, testigos y un masivo llamado a votar, como ocurrió en 2015.

Sólo un acuerdo en la dirigencia de esos partidos, conduciría a Venezuela cambios políticos según la visión de la dirigencia de centro y socialdemócrata, que son los de más preferencia.

El régimen de Maduro presiona en lo que serían elecciones presidenciales, se incluya también elegir a una nueva Asamblea Nacional (AN), y este acuerdo lo impulsan principalmente desde la instancia internacional, con foco principal en EEUU y Rusia.

El candidato opositor
Las principales élites políticas de Venezuela se pusieron en manos de la comunidad internacional, tanto el chavismo/madurismo como los sectores de oposición, así que la instancia internacional tiene en sus manos un mayor poder de decisión y el consenso que se generaliza es el de las elecciones.


En el lado opositor, Ramos Allup no ería candidato presidencial, además que no goza del respaldo internacional al ser dirigente de la Internacional Socialista, en un mundo en que están surgiendo regímenes conservadores. Tampoco es bien visto por las transnacionales petroleras, dada la experiencia de AD con las compañías, los sindicatos, la OPEP y la nacionalización del petróleo.

Capriles Radonski tampoco sería una opción, sus dos derrotas ante Chávez y Maduro no le permiten repetir, puesto que bajo su liderazgo no se pudo amalgamar a toda la oposición.

Entonces queda la figura de Leopoldo López, un hombre de Harvard, bien visto por los norteamericanos, aunque su partido se identifica con la Internacional Socialista, los métodos reaccionarios de López lo acercan a sectores conservadores. Trump exigió su liberación desde que asumió la presidencia y hasta ahora, aunque está en la embajada de España en Venezuela, es quién sería el candidato presidencial de la oposición.

El candidato chavista/madurista
En el régimen chavista/madurista también tienen sus divisiones. Maduro no será candidato nuevamente, al menos para los chinos y rusos ya no funciona y tiene que ser relevado. China y Rusia han dejado saber que si la oposición gana en Venezuela, trabajarían con estos, pero de todos modos impulsan a su propio relevo.


Diosdado Cabello ha tenido sus aspiraciones, pero su última reunión en Cuba permitió saber que no tiene posibilidades, ni el respaldo de China y Rusia para imponerse, así que declina para evitar una confrontación interna y tendrá que apoyar al candidato de Putin, Héctor Rodríguez.

Qué viene
Si la oposición logra imponerse una vez se decida cuando se realizarán las elecciones, la visión socialdemócrata será el signo político, pero tendrá que aplicar grandes cambios en lo económico y en lo político, además de realizar grandes concesiones para poder destrabar a Venezuela del atolladero.

Si el régimen chavista/madurista gana, se re legitimaría, porque esas elecciones serán reconocidas y conducidas por la comunidad internacional, sin embargo el chavismo tendrá que conducirse por una reforma económica que en cierto modo ha comenzado Maduro y que haga viable a Venezuela, para mantener el respaldo económico de China, Rusia y ahora EEUU.

1 comentario:

  1. Excelente análisis, sin embargo yo sólo te añadiría que no son tres sino cuatro grandes partidos políticos. Un Nuevo Tiempo es la otra pata de la mesa.

    ResponderEliminar

Muchísimas gracias por dejar sus comentarios

SUSCRÍBETE AL NEWSLETTER

Registra tu e-mail acá:

Debes verificar el enlace que te llega a tu e-mail para poder activar la cuenta

Delivered by FeedBurner