Pompeo y Boltón van por los militares leales a Maduro

Hay militares venezolanos que se mantienen leales a Maduro porque todavía controlan el dinero del flujo del petróleo y el contrabando de gasolina

Por Alex Vallenilla / @alexvallenilla

Luego que la comunidad internacional en su mayoría se ha alineado para apoyar a Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela, el siguiente paso que daría Washington es debilitar a la cúpula militar leal al madurismo, que controla el negocio del petróleo y el contrabando de gasolina.

Las sanciones petroleras son una opción que tiene sobre la mesa, el equipo de funcionarios norteamericanos que desarrollan la estrategia de ayudar a que Venezuela recupere la democracia y el Estado de Derecho. El foco se pone sobre el tema petrolero.

Actualmente Pdvsa es dirigida por un sector de militares que es leal a Maduro. El negocio del petróleo apenas se sostiene por el pago de los clientes en Estados Unidos, únicos en cancelar la factura completa, lo que todavía proporciona ingresos importantes al Estado venezolano.

En las opciones del tema petrolero hay dos posibilidades, la primera es que no se apliquen las sanciones petroleras sino que la directiva de Citgo sea cambiada en el marco de lo que es el gobierno de Juan Guaidó, reconocido en Estados Unidos y por el resto del Grupo de Lima.

Sin embargo lo anterior es un terreno todavía muy intrínseco, porque el tema podría irse al terreno judicial.

Lo otro es cortar totalmente las relaciones de compra y venta de petróleo y componentes para la fabricación de gasolina, que obligaría a Pdvsa a buscar otros clientes, ya que China y Rusia reciben petróleo en forma de pago por los préstamos que han hecho.

Las sanciones petroleras producirían una debacle final de la petrolera venezolana y su capacidad de producir gasolina prácticamente quedaría anulada, esto al mismo tiempo es un golpe directo a las mafias militares que están involucradas en el tema del contrabando de gasolina y que termina llevando más de la mitad del combustible a Colombia, que apuntala la producción de drogas.

Los militares venezolanos que controlan actualmente el negocio petrolero quedarían sin posibilidades de seguir controlando los recursos que de este negocio se derivan y que terminan también en corrupción, entrando en una situación de debilitamiento.