En Efectivo.- El Jefe del Comando Sur, Craig Faller informó
desde Brasil que la marina de Estados Unidos está lista para desplegarse en
Venezuela, lo que en un principio fue interpretado como el anuncio de una intervención
militar, más aun que en la víspera, los medios dejaron saber que el presidente
Donald Trump ha tenido la idea de bloquear a Venezuela con sus barcos.
La declaración de Faller es más
política, que militar. Lo primero que aclara es que se trata de ayuda
humanitaria para “el día después”. Una vez producida la salida de Maduro,
los norteamericanos desplegarían uno de sus protocolos militares para
Latinoamérica, que tiene que ver con la ayuda humanitaria, tal cual se le
ofreció a Hugo Chávez en 1999, cuando el deslave de Vargas.
Lo segundo es que Faller deja claro que EEUU cuida a sus “fichas”. En vista de que el sector económico en el
exilio, no tiene control sobre Juan Guaidó o Leopoldo López, han desarrollado
una campaña contra estos. Una de las partes de la guerra sucia contra el
dirigente de Voluntad Popular (VP), es que Guaidó no ha pedido u ordenado una
intervención militar.
Faller dejó bien claro en su
intervención que “la orden la dará Trump”. Está claro que Juan Guaidó no
tiene posibilidad alguna de ordenar o solicitar una acción bélica, menos en las
condiciones en que se encuentra EEUU, con su flota marina desplegada en China y
en Irán.
El Comando Sur prácticamente no
tiene disposición en estos momentos, sólo cuenta con unos 1.200 efectivos,
entre los cuales hay personal civil, el resto está asignado a misiones.
El Pentágono no tiene protocolos militares para una invasión a
Venezuela, al menos así lo detallan expertos del sector militar estadounidense,
sólo se tiene diseñado la protección de
activos norteamericanos, ayuda humanitaria y evacuación de personal
estadounidense.
| LA CAMPAÑA DE MENTIRAS |
El sector económico que ahora está en el exilio y se enriqueció con
Hugo Chávez y antes de la llegada de éste, luego que en 2002 se produjo una
ruptura, no tiene control directo sobre Juan Guaidó, ni son parte de la
estrategia de EEUU, por lo que desarrollan una campaña en redes sociales para minar
la reputación del dirigente de Vargas, con el fin de presionar e imponer
figuras que ex banqueros y ex contratistas, que contribuyeron al saqueo de
Venezuela, vía Cadivi, quieren como sus líderes políticos. Los dirigentes
políticos que quieren imponer, no superan 3% de popularidad.
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