Padrino apura a Maduro y a Guaidó para que terminen con los acuerdos

Las negociaciones se mantienen estancadas porque EEUU no acepta elecciones con Maduro en el poder, mientras el chavismo radical no apoya lo contrario 

Por Alex Vallenilla / @alexvallenilla

El general Vladimir Padrino López, un hombre de la línea de Moscú en Venezuela, hizo un llamado a Nicolás Maduro y a Juan Guaidó para que se retome la mesa de negociaciones, la cual se encuentra suspendida por presión de sectores radicales del chavismo que exigen presencia y participación en la misma.

Padrino López instó que debe mantenerse la búsqueda de una solución acordada y por la vía pacífica a la crisis.

El ministro de la Defensa de Maduro, presiona en ese sentido, porque en los compromisos entre rusos y norteamericanos, para producir la finalización de la crisis venezolana, se establece una negociación entre las partes internas, de modo que se legitimen todas las decisiones de como participarán las potencias en el desarrollo de los grandes negocios del gas, petróleo y electricidad.

Aunque la mesa de negociaciones se detuvo luego que el presidente Trump amplió las sanciones a todos los activos y bienes estatales bajo el control de Maduro, la reacción fue provocada por los sectores del chavismo que temen quedar por fuera de algún acuerdo y que eso signifique en el futuro juicios y cárcel.

Presión global

Los norteamericanos tienen la premura de lograr una solución en Venezuela, pero siempre bajo sus términos. La salida electoral, que ya es un acuerdo, no se termina de concretar porque EEUU exige que no puede hacerse con Maduro en el poder, mientras el chavismo se niega a participar en elecciones sin tener el control de Miraflores.

Para los norteamericanos la situación es apremiante. El mundo se dirige a una recesión global y la caída de los precios del petróleo son una amenaza para sostener la producción petrolera no convencional de EEUU, la cual funciona gracias al endeudamiento porque no tiene rentabilidad.

Pero la caída del precio del petróleo también impacta a Rusia, país productor, el cual tiene también dificultades económicas, por lo que las negociaciones son una prioridad.

China, EEUU y Rusia, se disputan el futuro de la primera reserva petrolera del mundo y lo que sería la segunda, la cuenca Guyana-Surinam, por la cual se espera que el diferendo con Venezuela se solucione formalmente pronto.